lunes, 5 de septiembre de 2016

La Regeneración es Monergista


Por Caesar Arevalo

En la regeneración, el Espíritu Santo nos une a Cristo, independiente de cualquier cooperación por parte de nuestra naturaleza humana no regenerada. Él nos da vida por medio de la llamada exterior que se extiende al pecador a través de la predicación de su Palabra; desarma nuestra hostilidad innata, elimina nuestra ceguera, ilumina nuestra mente, crea entendimiento, convierte nuestro corazón de piedra en un corazón de carne - dando lugar a un deleite en Su Palabra - todo lo que podemos, con nuestros afectos renovados, de buena gana y con mucho gusto abrazar a Cristo.

El profeta Ezequiel inspirado por el Espíritu Santo, afirmó "Yo les daré un solo corazón y pondré un espíritu nuevo dentro de ellos y quitaré de ellos su corazón de piedra y les daré un corazón de carne Luego se sigan mis preceptos y ser. Obedezcan mis leyes. Ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios. "(Ezequiel 11:19, también 36:26)

El apóstol Pablo dijo: "Porque conocemos, hermanos amados de Dios, para que él os ha elegido, pues nuestro evangelio no llegó a vosotros sólo en palabras, sino también en poder y en el Espíritu Santo y con plena convicción”. (1 Ts 1, 4, 5).

Es decir en la regeneración, la palabra no trabaja sola, sino que debe ir acompañada de la "germinación" del Espíritu Santo. Y otra vez "... que han nacido de nuevo, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra viva y permanente de Dios." (1 Pedro 1:23)

Esto significa que el deseo mismo de la fe, por la que creemos en aquel que justifica al impío viene a nosotros a través de la regeneración - y si alguien dice que esto nos pertenece por naturaleza y no por un don de la gracia, es decir, por la inspiración del Espíritu Santo, que modifica nuestra voluntad y convertirlo de la incredulidad a la fe y de la impiedad a la piedad, tal hombre o mujer hace caso omiso de la doctrina de los apóstoles, porque Pablo dice, "... aun estando nosotros muertos en pecados, [Dios] nos dio vida juntamente con Cristo; por gracia sois salvos." Y "... nos salvó, no por obras hechas por nosotros en la justicia, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y renovación del Espíritu Santo". (Tito 3:5) Y de nuevo: "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no es de vosotros, pues es don de Dios" (Ef. 2:8). o si alguien hace de la asistencia de la gracia dependiente de la humildad y la obediencia del hombre y no de acuerdo en que es un don de la gracia misma que seamos obedientes y humildes, contradice al Apóstol que dice: "¿Qué tienes que no hayas recibido? "(1 Cor. 4:7), y, "Pero por la gracia de Dios soy lo que soy" (1 Cor. 15:10).

La siguiente es una breve lista de cristianos en la historia de la Iglesia que creyeron en la regeneración monergista

La Escritura, Agustín, Concilio de Orange, Martin Luther (quien considero esta doctrina el corazón de la Reforma), John Calvino, Ulrich Zwingli, Blaise Pascal, Jonathan Edwards, Charles Spurgeon, John Owen, John Flavel,Thomas Manton, William Gurnall, Thomas Watson, Thomas Boston, Stephen Charnock, Francis Turretin, y todos los Puritanos del siglo 17 incluyendo todos los firmantes de la Confesión de Westminster y otros credos y confesiones de la Iglesia, J. C. Ryle, A. W. Pink, John Murray y algunos pastores y teólogos contemporáneos.

Las escrituras enseñan que el hombre es muerto en delitos y pecados y su voluntad esta no es libre pues esta alienada y controlada por el príncipe de la potestad del aire, esto es Satanás.

Y Él os dio vida a vosotros, que estabais muertos en vuestros delitos y pecados, 2 en los cuales anduvisteis en otro tiempo, conforme a la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia; 3 entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo; en la concupiscencia de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. 4 Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, 5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), (Efesios 2:1-5)

Por lo tanto, la única forma de volver a la vida es por el Espíritu de Dios, esto es el testimonio escritural y es necesario para que el hombre una vez regenerado tenga Fe: “puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe “(Hebreos 12:2) El hombre no puede ejercer fe de sí mismo, puesto esto es un don de Dios y el autor es Jesús y Él le da a quien Él quiere darlo.

Lo mismo es cierto con el arrepentimiento, el hombre natural odia Dios y no quiere someterse a Él y ni puede, al menos que Dios les conceda el don del arrepentimiento

Hechos 11:18 “¡De manera que también a los gentiles ha dado Dios arrepentimiento para vida!”

Hechos 5:31 “... para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados.”

2 Timoteo 2:25 “. . . por si quizá Dios les conceda que se arrepientan para conocer la verdad.”

TEXTOS BÍBLICOS QUE HABLAN DE LA REGENERACIÓN MONERGISTA

Y circuncidará Jehová tu Dios tu corazón, y el corazón de tu simiente, para que ames á Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, a fin de que tú vivas (Deut. 30:16)

Porque tú eres pueblo santo a Jehová tu Dios: Jehová tu Dios te ha escogido para serle un pueblo especial, más que todos los pueblos que están sobre la faz de la tierra. 7 No por ser vosotros más que todos los pueblos os ha querido Jehová, y os ha escogido; porque vosotros erais el más pequeño de todos los pueblos; 8 más porque Jehová os amó, y quiso guardar el juramento que juró a vuestros padres, os ha sacado Jehová con mano fuerte, y os ha rescatado de casa de servidumbre, de la mano de Faraón, rey de Egipto. (Deut. 7:6-8)

`Y les daré un corazón para que me conozcan, porque yo soy el SEÑOR; y ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios, pues volverán a mí de todo corazón. (Jeremías 24:7)

PORQUE ESTE ES EL PACTO QUE YO HARÉ CON LA CASA DE ISRAEL DESPUÉS DE AQUELLOS DÍAS, DICE EL SEÑOR: PONDRÉ MIS LEYES EN LA MENTE DE ELLOS, Y LAS ESCRIBIRÉ SOBRE SUS CORAZONES. Y YO SERÉ SU DIOS, Y ELLOS SERÁN MI PUEBLO. (Hebreos 8:10)

Porque este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días--declara el SEÑOR--. Pondré mi ley dentro de ellos, y sobre sus corazones la escribiré; y yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo. (Jeremías 31:33)

Yo les daré un solo corazón y pondré un espíritu nuevo dentro de ellos. Y quitaré de su carne el corazón de piedra y les daré un corazón de carne, (Ezequiel 11:19)

Además, os daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros; quitaré de vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón de carne. Y pondré mi Espíritu dentro de ti y causar que andes en mis estatutos y cuidadosamente obedezcas mis reglas. (Ezequiel 36:26-27)

De Jehová es la salvación: Sobre tu pueblo es tu bendición. (Selah) (Salmos 3:8)

Porque como el Padre levanta los muertos, y les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida. (Juan 5:21)

Los que creen en Jesús tienen vida eterna (Juan 5:24) porque Jesús les da Vida eterna para creer.

El Espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida. Y dijo: Por eso os he dicho que ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del Padre. (Juan 6:63-65)

Todas las cosas me han sido entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. (Mateo 11:27)

Y respondiendo El, les dijo: Porque a vosotros se os ha concedido conocer los misterios del reino de los cielos, pero a ellos no se les ha concedido (Mateo 13:11)

Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que viene a mí, de ningún modo lo echaré fuera.( Juan 6:37)

Y esta es la voluntad del que me envió: que de todo lo que Él me ha dado yo no pierda nada, sino que lo resucite en el día final. Porque esta es la voluntad de mi Padre: que todo aquel que ve al Hijo y cree en El, tenga vida eterna, y yo mismo lo resucitaré en el día final. (Juan 6:39-40)

Creemos más bien que somos salvos por la gracia del Señor Jesús, de la misma manera que ellos también lo son. (Hechos 15:11)

Nadie puede venir a mí si no lo trae el Padre que me envió, y yo lo resucitaré en el día final. (Juan 6:44)

Desde lejos el SEÑOR se le apareció, diciendo: Con amor eterno te he amado, por eso te he atraído con misericordia. (Jeremías 31:3)

“aun cuando estábamos muertos en nuestros delitos, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia habéis sido salvados), Porque por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es don de Dios; (Efesios 2:5-8)

Con cuerdas humanas los conduje, con lazos de amor, y fui para ellos como quien alza el yugo de sobre sus quijadas; me incliné y les di de comer. (Oseas 11:4)

(Como está escrito: TE HE HECHO PADRE DE MUCHAS NACIONES) delante de aquel en quien creyó, es decir Dios, que da vida a los muertos y llama a las cosas que no existen, como si existieran. (Romanos 4:17)

Así que no es del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. (Romanos 9:16)

Dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la suerte de los santos en luz: 13 Que nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo; (Colosenses 1:12-13)

Así también está escrito: El primer HOMBRE, Adán, FUE HECHO ALMA VIVIENTE. El último Adán, espíritu que da vida. (1 Corintios 15:45)

Porque ¿quién te distingue? ¿O qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido? (1 Corintios 4:7)

Mas por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo; antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios que ha sido conmigo. (1 Corintios 15:10)

Los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, más de Dios. (Juan 1:13)

Respondió Jesús, y díjole: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios. Dícele Nicodemo: ¿Cómo puede el hombre nacer siendo viejo? ¿Puede entrar otra vez en el vientre de su madre, y nacer? 5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. (Juan 3:3-5)

Sabiendo, hermanos amados de Dios, vuestra elección: 5 Por cuanto nuestro evangelio no fue a vosotros en palabra solamente, mas también en potencia, y en Espíritu Santo, y en gran plenitud; como sabéis cuáles fuimos entre vosotros por amor de vosotros. (1 Tes 1:4-5)

Todas las cosas fueron hechas por medio de Él, y sin El nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. (Juan 1:3)

Porque como el Padre levanta los muertos, y les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida. (Juan 5:21)

No que ya haya alcanzado, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si alcanzo aquello para lo cual fui también alcanzado de Cristo Jesús (Filipenses 3:12)

TODO aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios: y cualquiera que ama al que ha engendrado, ama también al que es nacido de él. (1 Juan 5:1)

Y pondré mi espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar sobre vuestra tierra; y sabréis que yo Jehová hablé, y lo hice, dice Jehová. (Ezequiel 37:14)

Como le has dado la potestad de toda carne, para que dé vida eterna a todos los que le diste. 3 Esta empero es la vida eterna: que te conozcan el solo Dios verdadero, y a Jesucristo, al cual has enviado. 4 Yo te he glorificado en la tierra: he acabado la obra que me diste que hiciese. 5 Ahora pues, Padre, glorifícame tú cerca de ti mismo con aquella gloria que tuve cerca de ti antes que el mundo fuese.

6 He manifestado tu nombre a los hombres que del mundo me diste: tuyos eran, y me los diste, y guardaron tu palabra. 7 Ahora han conocido que todas las cosas que me diste, son de ti; 8 Porque las palabras que me diste, les he dado; y ellos las recibieron, y han conocido verdaderamente que salí de ti, y han creído que tú me enviaste. 9 Yo ruego por ellos: no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son: 10 Y todas mis cosas son tus cosas, y tus cosas son mis cosas: y he sido glorificado en ellas. (Juan 17:2-9)

Trabajad, no por el alimento que perece, sino por el alimento que permanece para vida eterna, el cual el Hijo del Hombre os dará, porque a éste es a quien el Padre, Dios, ha marcado con su sello.( Juan 6:27)

Y yo les doy vida eterna y jamás perecerán, y nadie las arrebatará de mi mano (Juan 10:28)

Padre, quiero que los que me has dado, estén también conmigo donde yo estoy, para que vean mi gloria, la gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la fundación del mundo. (Juan 17:24)

En aquel tiempo, respondiendo Jesús, dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, que hayas escondido estas cosas de los sabios y de los entendidos, y las hayas revelado a los niños. 26 Así, Padre, pues que así agradó en tus ojos. 27 Todas las cosas me son entregadas de mi Padre: y nadie conoció al Hijo, sino el Padre; ni al Padre conoció alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar. (Mateo 11:25-27)

Y doy gracias al que me fortificó, a Cristo Jesús nuestro Señor, de que me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio: 13 Habiendo sido antes blasfemo y perseguidor é injuriador: mas fui recibido a misericordia, porque lo hice con ignorancia en incredulidad. 14 Mas la gracia de nuestro Señor fue más abundante con la fe y amor que es en Cristo Jesús. 15 Palabra fiel y digna de ser recibida de todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero. 16 Más por esto fui recibido a misericordia, para que Jesucristo mostrase en mí el primero toda su clemencia, para ejemplo de los que habían de creer en él para vida eterna. 17 Por tanto, al Rey de siglos, inmortal, invisible, al solo sabio Dios sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén. (1 Timoteo 1:12-17)

Y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. ( Apoc 7:10)

El testimonio de Agustín en su refutación a Pelagios

Para ellos [los pelagianos], la gracia significa el conocimiento con el que el Señor Dios nos ayuda, por lo que podemos saber cuál es nuestro deber. El verdadero significado de la gracia, sin embargo, es el amor que Dios infunde en nosotros, lo que nos permite, con un deleite santo para llevar a cabo la tarea que conocemos.

Agustín - Contra dos cartas de los pelagianos, 04:11

¿Puedes decir: 'Primero vamos a caminar en Su justicia, y observar Sus preceptos, y actuaremos de una manera digna, para que Él nos de su Su gracia a nosotros'? Pero, ¿Qué de bueno ustedes malvados pueden hacer? ¿Y cómo hacemos las cosas bien, a menos que ustedes sean buenos? Pero, ¿quién hace que la gente sea buena? Sólo Aquel que dijo: "Y yo los visite para hacerlas bien", y:”Pondré mi espíritu en vosotros y haré que andéis en mi justicia, y observar mis preceptos, y los pongáis '(Ez .36:27). ¿Está usted dormido? ¿No pueden oírlo decir: "Yo haré que andéis, yo te haré observar, 'por último,' Yo te haré hacer '? En serio, ¿todavía están arrogantes? Caminamos, es cierto, y se observa, y lo hacemos, pero es Dios quien nos hace caminar, observar, y hacer. Esta es la gracia de Dios que nos hace bien, lo que es Su misericordia la que va delante de nosotros.

Agustín - Contra dos cartas de los pelagianos, 4:15

"Querer es de la naturaleza, pero querer lo que es bueno es de gracia." - 

"Dios manda a hacer lo que no se puede, para que sepamos lo que debemos pedir a él." 

"La gracia solo trae toda buena obra en nosotros." - Augustine

"La naturaleza es común a todos, pero no la gracia." - San Agustín

"La gracia de Dios no encuentra hombres aptos para la salvación, sino que los hace aptos." - San Agustín

"La naturaleza de la bondad divina no es sólo para abrir a los que llaman, sino también para hacer que llamen y pregunten.". –

"Que Dios le dé lo que él manda, y manda lo que él quiere." - 

"La gracia no destruye la voluntad, sino más bien lo restaura." - 

"En algunos lugares, Dios requiere renovación del corazón [Ezequiel 18:31] y en algunos lugares testifica que es dado por él [Ezequiel 11:19; 36:26]... Pero lo que Dios promete a nosotros mismos no lo hacemos por decisión propia o la naturaleza, pero se hace a través de la gracia "- 

"De hecho, Dios requiere la fe misma de nosotros. Aún El no encuentra algo que requiere a menos que haya dado algo para encontrarlo " -

"Podemos posiblemente, sin ninguna absurdidad, sostener que no existió primero en nadie la buena virtud de una buena voluntad, que le da derecho a la eliminación de su corazón de piedra? ¿Cómo podemos decir esto, cuando todo el tiempo este corazón de piedra en sí significa precisamente la voluntad de las más dura, una voluntad que es absolutamente inflexible en contra de Dios? Porque si una buena voluntad es lo primero, es evidente que ya no es un corazón de piedra. -

"Desde que estas cosas son así, todo lo que se le ordena a los seres humanos por el Señor en las Sagradas Escrituras, en aras de probar el libre albedrío humano, o es algo que empezamos a obedecer por la bondad de Dios, o se exige con el fin de mostrarnos nuestra necesidad de la gracia para hacerlo. De hecho, una persona no comienza a cambiar del mal al bien por los primeros movimientos de la fe, a menos que la misericordia libre y gratuita de Dios produce esto en él.... Así que, por lo tanto, debemos pensar en la gracia de Dios como el trabajo desde el principio del de una persona cambiando hacia el bien, hasta el final de su finalización, por lo que el que se gloría gloríese en el Señor. Porque así como nadie puede traer bondad a la perfección sin el Señor, así también nadie puede comenzar sin el Señor. "

- Agustín, Contra dos cartas de los pelagianos, 02:23

CONCLUSIÓN

Mientras que la salvación es una obra unitaria de Dios es útil distinguir los diversos aspectos de la misma, si 

Queremos conseguir el evangelio correcto. 

La palabra "regeneración" es sinónimo con el concepto de "nacido de nuevo", y es lo que inicialmente nos une a Cristo que nos da la gracia para creer (Juan 1:3, 6, 21). 

Las Escrituras, como ya hemos visto, claramente nos muestran que nuestra creencia es el resultado, no la causa, 

Del llamamiento eficaz, la iluminación y la obra interior del Espíritu Santo (Juan 1:13, 1 Juan 5:1, Mateo 16: 17, Romanos 9:16, Hebreos 12:2, 2 Timoteo 1:9) 

Lo que sucede detrás de las escenas (la obra del Espíritu), no siempre se discute en cada verso que muestra a alguien que confía en Cristo. 

Pero cuando miramos a todo el consejo de la Escritura es abundantemente evidente. 

A veces, Dios abre una ventana espiritual para que podamos echar un vistazo a lo que ocurre cuando una persona 

Espiritualmente muerta es traída a la vida. 

Hechos 13:48 es un ejemplo de Dios trabajando en segundo plano cuando se predica el evangelio: "Cuando los gentiles, oyendo esto, se regocijaban y glorificaban la palabra del Señor, y todos los que estaban ordenados para vida eterna. "

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